Estás solo (Continuación versionadas
y adaptada del relato Estás sol@, de la web www.halloween.com)
Elvira era una niña
de unos diez años que no tenía papá, su mamá trabajaba todo el tiempo por lo
que tenía que dejar a su hija sola en casa, pero una noche, sintió un
escalofrío y tuvo
miedo de dejarla sola, pero como no podía dejar su trabajo ya que era su único sustento decidió irse.
"voy a llamarte cada 2 horas para ver como estas y no le abras a nadie, cuando llegue tocaré la puerta tres veces".
La madre cerró la puerta y se marchó, Elvira, asustada y sola decidió dormir para que pasara el tiempo sin darse apenas cuenta .
Al poco rato, el teléfono sonó despertando a la niña, se levantó del sillón y apresurada cogió el teléfono con la esperanza de escuchar la dulce voz de su madre:
- Mamá, ¿Eres tu?, ¿mamá?,¿mamá?....
Pero nadie contestó. Desilusionada y asustada colgó el teléfono y se fue a la cama mientras se tranquilizaba para quitar importancia a lo ocurrido…
miedo de dejarla sola, pero como no podía dejar su trabajo ya que era su único sustento decidió irse.
"voy a llamarte cada 2 horas para ver como estas y no le abras a nadie, cuando llegue tocaré la puerta tres veces".
La madre cerró la puerta y se marchó, Elvira, asustada y sola decidió dormir para que pasara el tiempo sin darse apenas cuenta .
Al poco rato, el teléfono sonó despertando a la niña, se levantó del sillón y apresurada cogió el teléfono con la esperanza de escuchar la dulce voz de su madre:
- Mamá, ¿Eres tu?, ¿mamá?,¿mamá?....
Pero nadie contestó. Desilusionada y asustada colgó el teléfono y se fue a la cama mientras se tranquilizaba para quitar importancia a lo ocurrido…
Un gato diabólico
saltó por la ventana con una motosierra en la mano cuando la madre llamo desde
su trabajo.
El gato negro
mató a la niña para que su madre fuese a ver lo que pasaba.
Avisaron a
lamadre y la madre entró despavorida en la casa.
Cuando la
madre estaba subiendo las escaleras, le cortó el cuello despiadadamente.
El vecino, que había escuchado un ruido muy
extraño, se acercó.
Cuando llegó,
el gato estaba sentado en el sofá tomando un refresco de granadina. Al ver así
al gato pegó un grito gigantesco. El gato agarró el vaso y se lo estampó en la
cabeza hasta
dejarlo
inconsciente. Cuando estaba desmayado, cogió la motosierra que la había dejado
en el cuarto de arriba, troceó las tripas y se las comió... FIN
Autores de
este espeluznante relato: OSCAR MUÑOZ GUTIERREZ
Y ÁLVARO CABRERA RUIZ.